El Monasterio de la Encarnación de Carmelitas Descalzas fué fundado el 25 de Marzo de 1751 por el sacerdote y Canónigo de la Catedral de Murcia Don Alejandro Peinado y Bocio, que deseaba vivamente la presencia de las hijas de Santa Teresa en la ciudad por su gran devoción a Nuestra Santa Madre Teresa de Jesús. Para ello trabajó con empeño y ofreció su cuantiosa hacienda en favor de la comunidad. Nacido en el castizo barrio de San Antolín en una familia noble y acaudalada, tuvo que vencer muchos obstáculos, incluso recurrir a los Reyes D. Fernando VI y su esposa Dª Bárbara de Braganza, hasta recibir el Decreto Real que rezaba así ”Que sin embargo de lo representado por el Consejo, ha resuelto su Majestad dar su licencia para que se funde el mencionado convento, sin restricción ni condición alguna”. (Febrero 1749)

La devota Murcia del XVIII las recibió con gran regocijo y se volcó materialmente en el ingreso e instalación de la nueva comunidad de religiosas que eran conocidas como las “Teresas” en la calle Sagasta. Con “Recibimiento solemne, ingreso triunfante y obsequio plausible” fueron acogidas los días 23, 24 y 25 de marzo de 1751 las siete hermanas fundadoras que procedían de varios Carmelos: Caravaca de la Cruz, San Clemente, Cuenca, Villanueva de La jara y Daimiel. Don Alejandro había fallecido dos meses antes de la llegada de las hermanas a Murcia.

 Doscientos años después, el deterioro del convento de la calle Sagasta y la visita del P. General, Silverio de Santa Teresa, obligó a la comunidad a buscar un nuevo lugar dónde ubicarse. No fue fácil dados los escasos recursos económicos la comunidad, pero con la intercesión a la Virgen de la Fuensanta, se fueron solucionando los problemas y gracias a D. Juan de Dios Balibrea (Vicario general de la Diócesis) y el bienhechor D. Bartolomé Bernal, se consiguió el terreno dónde actualmente nos encontramos. El 3 de octubre de 1964, tras varios años de obras, llegaron las hermanas al nuevo Monasterio diseñado por el arquitecto D. Fernando Garrido y situado a los pies del Santuario de Nuestra Señora de la Fuensanta en Algezares.

 Desde aquel 25 de marzo de 1751 las Carmelitas Descalzas, que actualmente somos 11 hermanas, vivimos entre el trabajo y la fraternidad, nuestra vida de oración, en un ambiente de silencio y soledad que nos favorece el encuentro personal con Jesús que es quien vertebra nuestra vida, insertadas en nuestra querida Murcia, la cual contemplamos diariamente desde este privilegiado lugar donde elevamos nuestras oraciones a Dios pidiendo por nuestra tierra y paisanos.

Profesamos un amor especial a la Virgen, como Madre y modelo de vida. pertenecemos a la Orden de los Hermanos de la bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo.